
Navidad
Voy a intentar algo que no se si pueda lograr.
Es ya un tema trillado pensar en que la Navidad no es lo que debería ser.
Es una epoca un poco loca que cada vez empieza más temprano.
Ahí por octubre ante la expectativa de los aguinaldos se dispara el consumo, los tarjetazos, las borracheras y cuanta posibilidad le veamos al tener un poquillo de plata extra.
También es la epoca en que más chiquitos se producen, o sea, la borrachera más la tentación termina en la cama y de veras que celebramos haciendo niñitos con las diosas.
Por otro lado, un poco menos sabroso, es la época en que se disparan las agresiones domesticas, unas por las borracheras y otras porque es uno de los pocos momentos del año en que estamos frente a frente con nuestra pareja (algunos se les olvida que tan solos y vacios están hasta que tienen que soportarse una semana).
Por supuesto es el pico de los casos de depresión, con todas las recriminaciones del caso (porque le puse los cuernos, porque no supe retenerla, porque se fue con otro, etc).
A esto le unimos el desenfreno del comercio por ofrecer cuanto chechere le cabe en sus locales y es inevitable sentirse arrollados por un apasionado torbellino de ruidos y centellas que nos arrastran a un lugar donde probablemente en plena capacidad de nuestras facultades nunca hubieramos querido estar.
Entonces que pasó?
Particularmente creo que lo sucedido hace 2000 años tiene que haber sido algo muy fuerte para poder generar tanto significado en nuestras existencias.
Ningun evento en la historia ha generado tantisima pasion como esta celebración.
Si lo pensamos un poco, nada ha generado tantas guerras ni enemistades como el Nacimiento de Jesus. En el nivel terrenal ha servido de excusa para dividir ciudades, enemistar vecinos, perseguir adeptos, exterminar pueblos y civilizaciones enteros, en fin, es una historia llena de las más oscuras acciones de que es capaz un hombre.
Entonces por que la seguimos celebrando?
Mi conviccion es que encima de todo esto existe una fuerza mayor que nos permite levantarnos cada mañana y saber que lo que ha sucedido no es la esencia del mensaje que queremos llevar dentro de nosotros.
Es la convicción de que a pesar de todo este cuadro tan pesimista existe algo más allá del nivel fisíco que no permite perder la esperanza.
Tal vez mi Dios no sea el tuyo, tal vez ni siquiera tengas uno pero podemos estar de acuerdo en que el significado de esta epoca está más allá de nuestro entendimiento y muy seguramente no es todo este corre corre demencial que nos imponemos cada diciembre.
Bendiciones y que la Paz este con ustedes.