21 de agosto de 2007

Un poco de realidad...

En estos días que han estado matizados por el TLC y sus secuaces del SI y del NO (con anuncio del corazón del si que se enamoró del corazón del NO) ha salido lo más repugnante y lo más sublime del costarricense. De aquellos años de mi infancia donde pasaba por Barrio Amón y los militantes de Costa Rica Libre se mostraban en las paredes de la casona diagonal al INVU con todos sus pertrechos de guerra para expulsar a los comunistas y estos a su vez se agolpaban en los alrededores de la Asamblea Legislativa para iniciar la inevitable ascensión al poder de la clase trabajadora, había tenido la esperanza que esos trasnochados conceptos se desterraron de nuestra Costa Rica hace mucho tiempo, con el Muro de Berlin derribado. Pero no....el corazón del SI se enamoró del corazón del No y la vieja dialéctica está vivita en la conciencia de los costarricenses. Ya vienen los comunistas a comerse tus chiquitos y ya vienen los imperialistas a dejarte sin pan ni escuela. Será necesario llegar a tales extremos para dilucidar este entrevero. Podríamos remediarlo a puro amor, pero habría que ver si el corazón del Si puede amar más que el corazón del No o al revés. Es previsible que este tema sea de gran debate en universidades (las de verdad) y centros de tertulia de todo el país. Veremos boinas y estandartes naranja y negro desfilar por la Avenida Central y pañoletas rojas en la avenida segunda (o al revés) pero todos y todas estarán salvando al país del depredador y despiadado monstruo imperialista (izquierda o derecha).
Lo cierto es que el país seguirá entrabado, sin ilusiones hasta que aparezca alguien que pueda echar a andar la República hacia un nuevo rumbo de prosperidad...
Por el momento si usted tiene un corazón del No consiga un corazón del Si (viceversa) y dejelos solos en un cuarto (en caso de que no quiera oír indiscreciones, pagueles un motel) y revise al día siguiente...seguramente tendrá la suerte de encontrarse con el machazo tipo gringo que presenta este comercial y quien sabe, a la larga serán como cuilos que dejaran la habitación repleta de SINOS o TALVESES que son seres muy acordes con la personalidad colectiva del costarricense. Que más se puede esperar?