16 de agosto de 2005

JUGANDO CON LOS SUEÑOS

Siempre he tenido la sensación de que, en realidad, nada de lo vemos existe.

Me parece que todo se debe a una gran pesadilla que nos hemos esforzado en vivir y falta poco para que nuestro apuntador salga de bambalinas y nos diga que la función se terminó.

Estamos en la tierra de los sueños, donde la muerte se puede revertir y los malos no existen.

Solo durmientes acurrucados huespedes se entretinen fumando sueños y manteniendo caliente en colchón.

Soñamos que hay tristeza y que los hombres mueren

Soñamos que tenemos hambre y que mueren los niños

Pero será acaso nuestra desesperanza la que nos ha cautivado y atrapado cual amante encantadora nos deja postrados en su cama y avergonzados y acomodadizos nos negamos a safar el cuerpo de aquel camastro y cerramos nuestros ojos y nos dejamos vencer por un sueño que fecunda nuestra avaricia y nos lleva a un solo lugar....